Un jardín atractivo en invierno

Algunas plantas encuentran en el invierno como un buen momento para florecer, mientras que otras nos enseñan su mejor perfil. Asociadas a las que siguen bonitas durante el invierno, no es difícil tener un jardín atractivo, ¡incluso en esta estación!

Un arce de corteza papirácea bajo la nieve, !luminoso !

Loropetalum con flores púrpuras.

Las que florecen en invierno
Estas no son numerosas, pero vale la pena que nos interesemos a elllas: florecen a menudo durante mucho tiempo. Las rosas de Navidad blancas hacen parte del grupo de plantas fieles, como las begoñas de invierno, que crecen bien en su compañía, un poco a la sombra. Pero es sobre todo entre estos arbustos en donde encontrará la mayor diversidad de floración invernal. Las finas flores del loropetalum, las del jazmín amarillo, la rosa del cerezo de flor (Prunus subhirtella), los amentos de los avellanos púrpura son entre otros parte de las delicadas floraciones invernales. Las plantas con floración invernal permiten de esta forma hacer la unión entre las últimas floraciones del otoño (si las heladas no son demasiado precoces) y las primeras de la primavera (narciso de las nieves).

Y perfumadas
Muchos arbustos con una floración invernal son perfumados, como la madreselva de invierno, el hamamelis, la mimosa (en climas suaves), laureolas… Plántelas cerca de su casa o en sitios de paso, para poder aprovechar en los días de sol, cuando están más perfumadas.

Un cornejo 'Winter Flame' : ¡lleva bien su nombre !

Las cortezas bonitas
Mientras que sus hojas han desaparecido, estas exhiben su corteza, en colores muy vivos o con efectos de textura verdaderamente interesantes. Las cortezas más coloridas las encontramos en los cornejos y los sauces. Podarlos cada dos años, en primavera, permite conservar los tallos jóvenes más vivos. En cuanto a las especies cuya corteza ofrece una bonita textura, hay que contar, por supuesto, con el abedul (¿sabía que se poda muy bien?), y también con los arces, con sus cortezas que parecen pergaminos (como el arce de corteza papirácea, Hacer griseum) o una piel de serpiente, (como por ejemplo el arce de David). Plántelos más bien a distancia de la casa, para poder verlos con un poco de perspectiva. Si los asociamos con grandes gramíneas, es un esplendor invernal.

Las gramíneas secas atraen la luz baja y juegan con el viento.

Las plantas que se metamorfosean
Son verdes durante todo el verano, pero en cuanto llega el mal tiempo, cambian de color. Estos camaleones son unos verdaderos tesoros para el jardín en invierno. Los evónimos moteados, y la mahonia común, particularmente, se engalanan con unas bonitas flores púrpuras hasta en abril. Los miscantus, en cuanto a ellos toman unos colores rosa leonado y anaranjados. Asocie un cornejo rojo, una gramínea y una mahonia: ¡no podrá perderse la escena!

Plantar y organizar
Finalmente, lo más complicado será de encontrar el sitio donde crear una escena invernal. Ya que en invierno, aprovechamos a menudo el jardín…. Detrás de las ventanas. Organícelo de forma visible detrás de una ventana. Y no olvide que las estaciones se suceden, incluyendo plantas que florecen en verano, ¡para que el conjunto sea interesante durante todo el año!