La carencia de hierro

También se le llama clorosis férrica. Es la enfermedad más frecuente en suelo calizo. Las plantas de tierra de brezo son las más sensibles. L falta de hierro en las plantas se traduce en unos síntomas precisos y es fácil remediarlo.

Los síntomas

Es en las hojas que se detecta la carencia de hierro. Las hojas empiezan a decolorarse y toman un tinte amarillo. Las hojas viejas son más fácilmente afectadas que las jóvenes. Los nervios se quedan verdes mientras que el resto de la hoja se decolora. Si el ataque es severo, la decoloración puede llegar a darlas una apariencia blanquecina y se queman al sol. El color de las flores no se ve modificado por la carencia de hierro. Sin embargo, las plantas en carencia florecen menos incluso no florecen en absoluto.

Su ciclo

La carencia de hierro es una enfermedad llamada fisiológica, que no está causado por un parásito o un gérmen patógeno cualquiera. Es la presencia de la cal en el suelo que es está al origen. La caliza, cuando está presente en una cantidad importante, impide a las plantas de asimilar el hierro. La carencia se agrava con el tiempo, a medida que la planta agota las reservas de hierro disponibles a proximidad. La sensibilidad de los vegetales varía enormemente, ya que algunas pueden crecer en la caliza sin dar ninguna señal de carencia.

Como luchar

Sólo un aporte de hierro en gran cantidad bajo una forma asimilable por la planta puede arreglar el problema. Hay por tanto que administrar un producto « anti-clorosis » a diluir en el agua del riego y a esparcir a los pies de la planta. No sirve de nada enterrar objetos oxidados, porque el hierro bajo esta forma no es asimilable por la planta. Es, sin embargo, posible de pasarse de productos de tratamiento si tiene un compost bien maduro. Efectivamente, dar regularmente esta materia fertilizante a los pies de las plantas sensibles a la caliza las impide de contraer una carencia de hierro.

La carencia de hierro

La clorosis del frambueso

Cómo evitarlo

La mejor forma de evitar el problema de la carencia férrica consite en escojer los vegetales resistentes al suelo calizo. Las jaras, las rosas, lirios, los euphorbias, corazoncillos y muchas otras tienen la reputación de no ser sensibles al exceso de caliza en el suelo. Para los rosales, lo importante es escojer un porta-injerto adaptado al suelo calizo, es decir rosales injertados sobre el rosal silvestre (Rosa canina). Puede igualmente beneficiarse de una fertilización orgánica rica en oligoelementos (algas marinas en compost por ejemplo), a poner en el suelo dos veces al año, a finales del invierno y a finales de la primavera.

Bueno a saber

La clorosis férrica puede confundirse con los efectos de un exceso de humedad. Una planta que recibe demasiada agua ve sus brotes amarillear y volverse casi blacos, mientras que las hojas adultas siguen bien verdes. A esto se le llama la clorosis húmeda. Es lo contrario que en el caso de una carencia de hierro ; los brotes jóvenes son bien verdes y las hojas viejas se decoloran.

M. Jean-Michel GROULT
 
Pépinières PLANFOR
1950 Route de Cère
40090 UCHACQ - FRANCE
Tel : 913.753.030